¿Cómo se clasifican las energías renovables?
A pesar de que existe la creencia popular de que las energías renovables no generan contaminantes o desechos tóxicos, la verdad es que sí lo hacen. La diferencia con sus contrapartes no renovables es en términos de grado. Es decir, generan en mucho menos cantidad. Básicamente, pueden clasificarse en dos tipos: no contaminantes y contaminantes. A continuación, se profundizará en ambas.
Como indica su nombre, no generan recursos contaminantes, por lo que se les considera la fuente de energía ideal. Claro, no todas son realmente efectivas o productivas, pero de igual forma presentan una alternativa más que interesante ante las energías no renovables. Estas energías no contaminantes son:
- Energía azul. Se obtiene a partir de la diferencia en la concentración de sal entre el agua de mar y el agua de río.
- Energía eólica. La generada a partir del viento, el cual hace girar una turbina que genera electricidad.
- Energía geotérmica. Se obtiene al aprovechar el calor que se produce al interior de la Tierra.
- Energía hidráulica. La producida por el movimiento de masas de agua. Se aprovecha la energía cinética para mover una turbina que genera electricidad.
- Energía mareomotriz. Se obtiene aprovechando el movimiento de las mareas.
- Energía solar. Se aprovecha la radiación solar para generar electricidad y almacenarla.
- Energía undimotriz. Se utiliza el movimiento de las olas producida por el viento para realizar un trabajo útil.
Son las que se basan en biomasa o materia orgánica. El proceso de fermentación al cual se somete la biomasa genera biogás o bioetanol, el que se utiliza como combustible. Estas energías, al igual que las no renovables, generan dióxido de carbono, por lo que aún se miran con cierto recelo.